El veterano dirigente de la izquierda venezolana Pompeyo Márquez, cree que ante el proyecto de reforma constitucional que impulsa el Gobierno, la primera medida que debe promoverse es la convergencia de los diversos factores de oposición en torno al único punto que hasta ahora está claro y es decirle "no a la reforma".
Opina que entrar en las consideraciones sobre cómo votar el texto de 33 artículos presentado por Chávez o plantearse una estrategia abstencionista -como algunos ya han asomado- es prematuro y estima que una decisión como esa podría tomarse en unos dos meses cuando algunos aspectos que dependen del CNE estén más claros. Márquez es partidario de promover una gran movilización cívica para darle cuerpo en la calle al espíritu de rechazo contra la reforma que amenaza las bases de la democracia y que permita denunciar con contundencia el golpe constitucional que ella implica.
Destacó que en los artículos 2, 4 y 6 del texto fundamental, están sentadas las bases de un régimen plural y alternativo y propone que las organizaciones sociales y gremiales asuman la defensa de los derechos fundamentales amenazados por el plan chavista y que los partidos políticos entiendan que el protagonismo es de los ciudadanos organizados. Recordó que en 1999, cuando él rechazó la Constitución, a lo que se opuso fue a los aspectos que implicaban la militarización del país, al rasgo centralista y a la concentración de poder, de allí que recalcó la necesidad de salir a defender los aspectos contenidos en el texto vigente.
Los artículos que Pompeyo Márquez destaca como fundamentales son los que expresan que "Venezuela se constituye en un Estado democrático y social de Derecho y de Justicia, que propugna como valores superiores de su ordenamiento jurídico y de su actuación la vida, la libertad, la justicia, la igualdad, la solidaridad, la democracia, la responsabilidad social y, en general, la preeminencia de los derechos humanos, la ética y el pluralismo político" (artículo 2), que describen a la nación como "Estado federal descentralizado" y se rige por los principios de integridad territorial (artículo 4) y que "será siempre democrático, participativo, electivo, descentralizado, alternativo, responsable, pluralista y de mandatos revocables" (artículo 6).
La presidenta de la Asamblea Nacional, Cilia Flores, aseguró que otros artículos de la Carta Magna, relacionados con los 33 que están en el proyecto de reforma presentado por el jefe de Estado, serán modificados.
"La propuesta que consta en el proyecto se puede perfeccionar, la Comisión Mixta tiene que realizar ese trabajo, tiene que ver dónde inciden los 33 artículos planteados por el Presidente", sostuvo Flores.
La lideresa del Poder Legislativo señaló que, en particular, los primeros cambios se limitarán a aspectos formales. Como ejemplo citó el caso de la nueva denominación que recibirá la Fuerza Armada, que de Nacional pasará a Bolivariana, lo cual obligará a reemplazar ese término en el resto del texto.
Sin embargo, Flores no descartó que se agreguen elementos de mayor calado en la reforma, una vez que la Cámara discuta punto por punto la iniciativa redactada en Miraflores.
La diputada ofreció estas declaraciones luego de inaugurar la "sala situacional" de la AN, que se encargará de "sistematizar la consulta pública a nivel nacional" sobre el proyecto expuesto por Hugo Chávez.
Un solo bloque
En el oficialismo desestiman la posibilidad de que la reforma sea considerada por partes. Adelantan que el mandatario, proponente de las modificaciones, ejercerá el derecho que le otorga el artículo 345 de la Constitución y solicitará que "se vote todo en un solo bloque".
El presidente de la Comisión de Defensa de la AN, Francisco Ameliach, calificó como "perfectos" los cambios introducidos en materia castrense y restó importancia al hecho de que se haya suprimido la definición de la FAN como una "institución esencialmente profesional" y "sin militancia política".
"El artículo 328 está perfecto. En la Ley Orgánica de la Fuerza Armada se establecerá que los uniformados no pueden militar en partidos políticos", aseveró Ameliach, tras recalcar que "los militares tienen que ser militantes políticos de las políticas de su comandante".
El parlamentario acotó que concebir a la FAN como "una institución esencialmente profesional" le imprime "una connotación elitesca" al organismo. Asimismo, subrayó que la reforma ampliará los ámbitos de acción de la Guardia Nacional que, aclaró, "seguirá cumpliendo sus mismas funciones".
Los miembros de la directiva del Poder Legislativo se reúnen hoy con sus pares del Consejo Nacional Electoral, con la intención de "ajustar sus cronogramas" para organizar el referendo sobre la reforma.
Igualmente, Flores juramentará esta tarde a los primeros 400 promotores sociales que impulsarán el debate constitucional.
Maracaibo.- El gobernador del estado Zulia, Manuel Rosales, calificó de "irresponsable" la aprobación, por parte de la Asamblea Nacional, de la propuesta de reforma constitucional y afirmó que ésta debió ser revisada y analizada con más cautela.
"Cualquier persona deduce que ni siquiera la leyeron los señores diputados. Es la inclinación mas vulgar y grotesca que en la historia de Venezuela se haya visto de un poder frente a otros", dijo El mandatario zuliano.
Según su precepto, la aprobación en primera discusión fue hecha a la ligera. "¡Cómo, de la manera mas sumisa y vergonzosa, aprueban una propuesta tan delicada, que se relaciona con el cambio de la sociedad venezolana, nuestras raíces, nuestra historia, en una mera discusión de vaguedades! "
Agregó Rosales: "la aprueban como si se estuvieran cambiando las medias, de tal manera que la irresponsabilidad rompe cualquier parámetro y cualquier análisis y la propia Constitución es violada porque se establece que la discusión debe hacerse en el recorrido de dos años y ellos pretenden provocar la aprobación en tan sólo dos o tres meses".
Rosales denunció la semana pasada el "golpe constitucional" que implica un cambio de la Constitución en esos términos y anunció que su partido Un Nuevo Tiempo, debatirá con la sociedad la estrategia para hacerle frente. No explicó si su postura será abstencionista o no.
Nueva York.- Las reformas a la Constitución impulsadas por el presidente Hugo Chávez para perpetuarse lo más posible en el poder, "socavan la democracia en Venezuela", opinó ayer el diario The New York Times.
"El plan de Chávez constituye un paso más hacia el objetivo de incrementar el control de su gobierno sobre la política y la economía de Venezuela", dijo el rotativo en un editorial titulado "La apropiación del poder por Chávez".
Según el diario, citado por un despacho de AFP, "detrás de las tácticas de retórica orwelliana, sus esfuerzos para acumular el poder y aferrarse a él durante el mayor tiempo posible están socavando la democracia en Venezuela".
"Chávez sigue siendo -agrega- al menos desde un punto de vista técnico, un demócrata. Derrotó a la disfuncional oposición en elecciones consideradas limpias por los observadores internacionales".
"Sin embargo, el barniz de respetabilidad democrática se está gastando. Todos los miembros de la Asamblea Nacional son aliados de Chávez. Sus aliados también dirigen la Corte Suprema, todos los gobiernos estatales salvo dos y Pdvsa".
El New York Times opina que las medidas de "democracia participativa" que dieron más poder a las estructuras de base, erosionan el de los gobiernos estatales y locales donde la oposición aún retiene "algún vestigio de poder".
"El plan de Chávez para permitirse a sí mismo presentarse a la reelección todas las veces que quiera --orientado a su objetivo proclamado de gobernar hasta el 200 aniversario de la independencia de Venezuela, en 2021-- podría dejar a ese país atrapado durante los años venideros en manos de un hombre todopoderoso".
"Eso es una democracia participativa donde sólo participan Chávez y sus amigos", concluye el prestigioso diario norteamericano.
Es mucho lo que está en juego con la polémica reforma constitucional presentada a la Asamblea Nacional por el presidente de la República. Y también son múltiples las dimensiones de esa propuesta en lo que tiene que ver con sus implicaciones para toda nuestra sociedad. De allí que el debate de la misma debe trascender el plano de lo jurídico y exigir y garantizar la participación activa y efectiva de los distintos actores y sectores de la vida nacional.
Por encima de todo, se pone en grave peligro lo poco que nos queda de democracia en Venezuela. Esto se evidencia en diversos aspectos del citado anteproyecto, entre otros, en el afán del Presidente de perpetuarse en el poder ilimitadamente y en la descomunal concentración de poderes que el mismo tendría, los cuales servirían para acrecentar el ya exagerado personalismo y autoritarismo presidencial que hoy padecemos los venezolanos.
Preocupan sobremanera no sólo algunos aspectos legales de dicha reforma, sino sus repercusiones en la vida económica, política, social y cultural del país. Piénsese, por ejemplo, en las consecuencias de la eliminación de la autonomía del Banco Central, en el propósito de convertir a la Fuerza Armada en una institución pretoriana, en la constitución de un poder popular manipulado desde Miraflores y, en general, en el trastrocamiento y la vulneración de nuestros valores democráticos.
Ante este panorama es necesario activar con mayor fuerza el papel orientador de nuestras casas de estudio, en sintonía con lo que está previsto en el artículo 2 de la Ley de Universidades. También es preciso que contribuyamos a impulsar un movimiento democrático que, entre otras cosas, exija un debate plural de esa reforma y reivindique la opinión de nuestros expertos universitarios y de otros actores de la sociedad civil.
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