"EL CHIVO". Cuando el anciano enfermo salió de una de sus cada vez más frecuentes recaídas citó a su habitación en el Cimeq (Centro de Investigaciones Médico Quirúrgicas, en el reparto Siboney, Playa, de La Habana) al vicepresidente y feroz represor Ramiro Valdés y le espetó: "Allá en Venezuela hay revolvimiento y descontento entre las fuerzas de la revolución de Chávez y hay que meterle la mano rápidamente, pues se está deteriorando el apoyo popular. Preséntate cuanto antes. Ya hablé con él. Le dije, además, que ibas a ayudarlo en el problema eléctrico y así es que te va a presentar". Siendo el más cercano de los colaboradores de Fidel y conservando distancia desde hace muchos años con Raúl, el combatiente de la Sierra Maestra apodado "el Chivo" entre sus más cercanos se vino con el fin de preparar unos grupos especiales de choque para reprimir manifestaciones y controlar el orden público en caso de un estado de conmoción provocado por el "apagón nacional" al que le tienen pavor, tal y como en esta columna se ha planteado. Otros asuntos a considerar en la visita de Valdés tuvieron -o tienen- que ver con el drama ocasionado con la detención de Fernández Barrueco y el cese -¿temporal?- de sus operaciones de triangulación de alimentos con Cuba desde Puerto Cabello, La Guaira y Panamá a través de Alimport. Hay preocupación pues la crisis alimenticia en la isla está a punto de ser peor que la que sufrieron cuando se suspendió la ayuda soviética. La escasez de comida es enorme y cada vez hay menos compras a EEUU y Europa por la falta de divisas que antes suplía Venezuela. (En el tema alimentario aparece mencionado en documentos otro venezolano: Sarkis Arslanian, como también en otros referentes a la reparación en los astilleros Braswell de Panamá de una flota de barcos atuneros junto al detenido Fernández en los que supuestamente habría socios cubanos. Por eso el apuro en descongelar cuentas conjuntas de cubanos y venezolanos). Al drama de los suministros se añadió un incidente el 31 de diciembre entre el ministro de Comercio cubano y el representante de la empresa española Vima, quien pasado de tragos fue expulsado del país. Esa empresa tiene suspendido 80% de sus suministros tras el caso. Por eso no han podido reabrir "La Puntilla", la más famosa tienda de insumos que se incendió hace un año, pues no hay con qué llenar. Otro aspecto del viaje de "el Chivo" tiene que ver con la llamada "Operación Barrio Afuera" -la de la evasión del país de médicos de Barrio Adentro- que hay que minimizar. Para evitar la fuga de ellos se les vino a ofrecer la posibilidad de llevarse todo tipo de electrodomésticos y enseres de casa sin pagar impuestos en la isla. Antes estaba permitida sólo la entrada de pequeños aparatos y eran los jefes de las diferentes misiones los que sí tenían esas ventajas que incluyen aire acondicionado, neveras y lavadoras. Los temores en torno al cese del flujo de divisas hacia la isla a través de las regalías, los pagos, las triangulaciones y las colosales comisiones angustian a la nomenclatura comunista de la isla. Todas estas razones justificarían que su último viaje fuera tan notorio y no secreto. Chávez debe recordarlo muy bien, pues este militar se atrevió a callarlo en un homenaje al Che, en el monumento en su honor en Santa Clara. El venezolano comenzó a entonar las notas del Himno Nacional y Ramiro le dijo que ellos ante el Che guardaban silencio total. Vaya duro...
mEdio
A VERSE EN EL ESPEJO FIDELISTA. Un amigo que viajó a La Habana quiso visitar al que por años fue el embajador de Cuba en Venezuela, Germán Sánchez Otero, y quien se llegó a convertir en el pro cónsul -o más bien komissar- del líder cubano en Venezuela. Su poder por encima de ministros y vicepresidentes lo convirtió en visita obligada para quienes querían hacer negocios en la isla auspiciados por el caudillo de Sabaneta. Buscó la residencia con estos datos: "Quinta avenida entre 84 y 86, edificio 8603, una casa azul de un lado y otra rosada, cerca de un hotel y la embajada rusa, un edificio desteñido de tres pisos con las ventanas en arco", nuestro común amigo llegó al sitio. Al seguirse acercando vio a lo lejos al ex embajador lavando un carrito en la calle. Un vecino le dijo que mejor era que se fuera pues estaba "en pijama" y vigilado. El término se usa para señalar a quien fue defenestrado del Gobierno y lo mandan a su casa en una especie de confinamiento. El interlocutor le contó que dos de los hijos de Germán estaban presos. Ante esa advertencia mi amigo se retiró a su hotel no sin antes tomarle una foto a distancia al otrora funcionario de confianza de Fidel y sus cancilleres Robaina y Pérez Roque. Ambos en situación similar. Por lo que me cuenta pareciera que aquel cuento de una supuesta conspiración contra la autoridad de Raúl comienza a tener visos de veracidad. Sobre la salud de Fidel me reiteró que sus momentos de lucidez son cada vez menos. Me trajo el chiste que circula entre los habaneros: "la oposición a Raúl en la isla ya tiene nombre: Fidel". Y de vez en cuando manda y detiene los tímidos pasos de aquél.
bajo
ENCUESTAS ROJAS. Las angustias presidenciales tienen basamento. Las consultas de opinión pública, entre ellas las del IVAD de Seijas -luego interpretados por quien funge de presidente del BCV, Nelson Merentes, quien las discute con el jefe- indican un deterioro acelerado: casi 70% estiman que el mandato debe terminarse entre 2010 y 2012 y para sacarlo por los votos se identifican 38% rojo y 49% demócratas; los bloques chavistas, duro y clientelar, llegan a un máximo de 40% donde 33% es del sector público y tiene convicción ideológica con la izquierda tradicional y 6 a 8% es del pro chavismo light; el bloque oposición está entre 24 y 30% y los que no quieren nada con la oposición pero tampoco con Chávez ascienden a 22%. 3/4 partes de la población vinculan al Gobierno con la corrupción financiera y banqueros; 3/5 partes creen que Chávez nos conduce a conflictos; 2/3 se identifican como independientes y 50% creen firmemente que la corrupción aumentó con Chávez...
VARIAS. Me encuentro con Héctor Payares, a quien algunos señalaron de fungir de intermediario en la posible oferta por Globovisión y se muestra sorprendido. "No tengo nada que ver con eso", reitera. Pero sí sabe de dónde vino la infamia. Habrá un castigo de 2 a 3 meses para liquidaciones de Cadivi. Chávez reconoció ya que cada uno de una docena de altos funcionarios tenían relación directa con una casa de bolsa. Por eso los allanamientos buscando pruebas...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario