Una buena base histórica breve del socialismo, para acrecentar nuestros conocimientos acerca del Socialismo del Siglo XXI.
Para comprender lo que significa el socialismo del siglo XXI es necesario recurrir a la historia de esta doctrina y sus diferentes realizaciones en modelos políticos y económicos, desde los más democráticos y humanistas hasta los autoritarios y dictatoriales, cuyas últimas expresiones las conocimos en la Unión Soviética y en Libia, cuando ejercimos funciones diplomáticas en esos países. El socialismo nació del sentimiento de que la Revolución Francesa al terminar con la monarquía y el régimen feudal no suprimió las desigualdades, las cuales se acentuaron con el "Liberalismo Industrial". Los primeros pensadores socialistas en el siglo XVIII y XIX como Owen, Saint Simon y Fourir imaginaron mundos mejores, cercanos a la utopía y trataron de realizarlos de manera experimental. Saint Simon fue el primero en encontrar la dimensión política de ese socialismo utópico, mientras que Fourir insistía en las asociaciones de base agrícola e industriales con el cooperativismo. Más adelante Proudhon, en el interés de la justicia pero dentro de la libertad y la igualdad criticó la propiedad privada, pero se oponía a toda forma de autoridad tanto divina como política tratando de eliminar el Estado, reemplazándolo por un sistema contractual dentro de una república descentralizada y le asigna un rol fundamental a los obreros con conciencia de clase.
El pensamiento de Marx y su critica al capitalismo le asignó una dimensión científica al socialismo como etapa superior a la sociedad liberal e industrial. Pero a partir de Marx también nacieron las diferentes líneas que hoy se encuentran en los distintos modelos del socialismo.
Primero lo social
Desde este inicio el socialismo concibe lo social antes que lo individual y la sociedad como un todo orgánico y la posibilidad de realizar un proyecto político y económico. En la historia del socialismo europeo Elie Halévy ubica esta palabra como un producto de la revolución industrial con una actitud de protesta contra los efectos injustos del liberalismo que se iniciaba. Es lo que hizo decir a Emile Durkheim que el socialismo es un "grito de dolor" y algunas veces de cólera del ser humano que siente la injusticia colectiva, para él más que una ciencia es una respuesta a la cuestión social.
Carácter científico
El socialismo adquiere carácter científico con los aportes filosóficos y económicos del alemán Carl Marx (1818-1883) y de Friedrich Engels (1820-1895). El socialismo en ellos tuvo una connotación ideológica, materialista y dialéctica. La visión extrema de este planteamiento fue la necesidad de la lucha de clases y la imposición de la dictadura del proletariado. Una dimensión humanista y democrática fue la de Jean Juares en Francia (1859-1814) que procuró conciliar el socialismo con la democracia, aceptando el juego político parlamentario. Una vertiente minoritaria fue el socialismo sindical revolucionario con la tesis del anarquismo con el instrumento de la huelga general.
En el siglo XXI dentro del concepto del socialismo, pueden encontrarse distintas manifestaciones en los 192 estados del planeta. Con el fin de la Unión Soviética terminó el paradigma del realismo socialista y de las democracias sociales, sólo quedan algunos ejemplos como es el caso de Cuba y Corea del Norte. En Europa el socialismo ha tenido expresiones democráticas en los países Nórdicos y en Europa Occidental como es el caso de Inglaterra y España. En África se encuentran expresiones del socialismo como el socialismo Libio inmerso de la cultura musulmana. En América Latina se esta dibujando un nuevo panorama inclinado a las ideas socialistas, más allá del modelo marxista cubano.
Venezuela con el presidente Chávez ha planteado una nebulosa socialista donde todavía puede identificarse con la democracia pero que puede caer en la tentación totalitaria como ha sido la expresión del socialismo marxista de Cuba. Los triunfos electorales del presidente Lula en Brasil, de la señora Bachelet en Chile, de Kirchner en Argentina, y los más recientes de Daniel Ortega en Nicaragua y Rafael Correa en Ecuador, podrán dibujar mejor la expresión de un socialismo latinoamericano dentro del Estado democrático y el Estado social de derecho.
Todos observan lo que pueda pasar en Venezuela ahora cuando el presidente Chávez ha orientado a la República con los motores del nuevo socialismo. Ojalá podamos conocer qué hay detrás de ese socialismo nebuloso.
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