Con la banda presidencial terciada encima del uniforme militar verde oliva y boina roja arribó al paseo Los Próceres, a la 1:30 del mediodía, en una limusina descapotada, el mandatario Hugo Chávez, para encabezar "el desfile con motivo de celebrarse el decimoquinto aniversario de la revolución bolivariana", dijo el general Euclides Campos Aponte, comandante de la formación, al solicitar permiso para iniciar el acto conmemorativo al fallido golpe militar del 4 de febrero de 1992.
"Es un día de jubilo, de patria, de pueblo. ¡Vaya nuestro saludo al pueblo venezolano!, pueblo heroico", respondía Chávez a Campos Aponte, cuando las imágenes, en cadena televisiva, mostraban a un hombre detrás del mandatario, que al grito de "¡Chávez! ¡Chávez!", rompió la seguridad presidencial y sacado enseguida por las autoridades.
"El 4F es hijo de las luchas del pueblo, porque en el 4F se recogieron 150 y más años de las frustraciones. El 4F es hijo del último suspiro de Bolívar en Santa Marta, del balazo traicionero de Berruecos", prosiguió Chávez sin inmutarse por la interrupción.
El mensaje televisado que enviara Chávez a sus aliados para que depusieran las armas en 1992 y una "demostración ecuestre representando a Maisanta, vestidos a la usanza de los guerrilleros antecedieron el desfile.
Con un minuto de silencio y 28 salvas de fusilería rindieron honor "a los patriotas caídos".
Luego, Chávez sumó a este homenaje a los 4 estudiantes muertos en Carabobo. Las unidades militares que participaron en los hechos fueron condecoradas con la "Orden 4 de Febrero"..
Más de dos horas tomó que 9 mil 800 efectivos portando los fusiles rusos Ak-103, los aviones Mirage 50, los F16, los helicópteros rusos y los Sukhoi, así como la reserva militar, pasaran por la tribuna.
"Las tropas pasaron trotando y cantando ¡Patria, socialismo o muerte! El que tenga ojos que vea y el que tengo oídos que oiga (¿) Queremos llevar adelante el Proyecto Nacional Socialista Simón Bolívar en paz y en democracia, pero que nadie se equivoque (...) Siempre lo dije, y hoy más que ayer: la revolucion bolivariana es pacífica, pero no es una revolución desarmada. Esas armas allí están en las manos de soldados patriotas para hacer realidad el sueño y el mandato del pueblo que es el camino al socialismo del siglo XXI", advirtió Chávez, al finalizar el desfile.
Parafraseando a Fidel Castro, el mandatario agregó: "La historia y el pueblo nos absolverán. Hagamos realidad el sueño de un pueblo y justifiquemos los dolores de todo lo que ha ocurrido para que nada sea en vano".
Dijo que aprovechaba "el Día de Patria, para insistir" en su llamado "a que continuemos fortaleciendo la unidad de la Fuerza Armada, del pueblo y de todos los factores revolucionarios, de las corrientes políticas y de los sectores sociales. ¡Unidad!, debe ser nuestra divisa!".
2 comentarios:
Al parecer al venezolano le gusta estr pisado por una bota....
Lo triste es que no a todos nos gusta...
Publicar un comentario